IMPORTANTES LOGROS PARA MÉXICO EMN OLIMPIADA INTERNACIONAL DE MATEMÁTICAS
ARTÍCULO DE OPINION DE LA SENADORA ADRIANA GONZALEZ CARRILLO
Delegación Mexicana en la Olimpiada Internacional de Matemáticas, en Astana, Kazajistán Foto: www.launion.com.mx
En días pasados se llevó a cabo en Baldauren, Kazajstán, la edición número 110 de la Olimpiada Internacional de Matemática (IMO). La IMO es un campeonato mundial de matemáticas para estudiantes de educación media superior que se celebra anualmente desde 1959. En 51 años de existencia, la membresía de la organización pasó de siete países fundadores a 97 en la actualidad. Los miembros participantes envían a sus seis estudiantes más destacados quienes, generalmente, son también los que mejores puntajes obtuvieron en las Olimpiadas Nacionales de Matemáticas que se celebran a nivel nacional. Mediante la evaluación de las respuestas a problemas matemáticos que abarcan áreas como la geometría, la teoría de números y otras, un Jurado integrado por científicos de reconocido prestigio determina, luego de varias rondas de examinación, a los ganadores de las medallas de oro, plata y bronce. Además el Jurado otorga, si lo estima conveniente, certificados de Mención Honorífica a aquellos participantes que obtuvieron un puntaje excepcionalmente alto en la resolución de al menos un problema matemático.
Irving Daniel Calderón Camacho | Foto: www.imo-official.org
Así Irving Daniel Calderón Camacho, originario de San Mateo Atenco y brillante estudiante de los últimos meses de preparatoria en el Instituto Universitario Franco Inglés de México, institución incorporada a la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), obtuvo una Medalla de Bronce. Para beneplácito de los mexiquenses y, desde luego, de todos los mexicanos, Irving Daniel obtuvo este gran reconocimiento de entre un grupo de 517 concursantes provenientes de 96 naciones. Cabe señalar que otros jóvenes mexicanos de Morelos, Aguascalientes, Chihuahua, Jalisco y Nuevo León obtuvieron medallas, reconocimientos y puntajes muy importantes. Su pasión por las matemáticas, sin embargo, venía de mucho tiempo atrás. Irving Daniel participó y obtuvo reconocimientos en múltiples certámenes nacionales a nivel primaria y secundaria además de haber representado a México, en una ocasión, durante la Olimpiada Rioplatense de Matemáticas que anualmente tiene lugar en Argentina.
Por supuesto, más allá del innegable talento de este joven mexiquense, hay una historia de esfuerzo y dedicación que vale la pena subrayar.
Después de un arduo entrenamiento científico e intelectual, auspiciado por una serie de instituciones como el Consejo Mexiquense de Ciencia y Tecnología y la propia Secretaría de Educación Pública, Irving Daniel ganó la medalla de oro durante la 23ª Olimpiada Mexicana de Matemáticas celebrada el año pasado. En esa competencia nacional, otros mexiquenses recibieron menciones honoríficas como Sergio Contreras Garduño del Centro Universitario Ixtlahuaca y Alexis Jiménez del Centro de Bachillerato Tecnológico Mario Colín de Atlacomulco. A partir de entonces, Daniel Irving participó en distintas sesiones y cursos de entrenamiento organizados por la Facultad de Ciencias de la UNAM y el Comité Organizador de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas. La idea detrás de estas actividades es, precisamente, apoyar a los jóvenes talentosos de distintos niveles educativos para que participen satisfactoriamente en las Olimpiadas Internacionales de Matemáticas.
Este modelo se ha venido replicando en otras disciplinas como la física, la química y la historia mediante actividades que apoyan, entre otras instituciones, la Academia Mexicana de Ciencias. Ahí también han destacado brillantes jóvenes mexiquenses como Guillermo Caballero García quien obtuvo medalla de bronce en la XIV Olimpiada Iberoamericana de Química celebrada en La Habana Cuba en 2009.
Todo esto es motivo de orgullo y de encomio. El talento de los jóvenes mexiquenses, el apoyo que las instituciones tienen la obligación y el deber de brindarles, y el destacado papel que, en general, nuestro país ha obtenido en este tipo de competencias (México ocupa, a nivel global, el lugar 33 en la IMO) hacen necesario efectuar un reconocimiento a estos logros. Sin embargo, es pertinente ligar este tema con el que abordábamos la semana pasada. No cabe duda que ante el trágico panorama del trabajo infantil, la deserción escolar y la falta de infraestructura educativa adecuada en el estado de México, hay una gran responsabilidad de todos, empezando por las autoridades, para que niños y jóvenes mejoren su desempeño educativo y, con ello, construyan un futuro provechoso. Es nuestra responsabilidad generar las condiciones para el surgimiento de una nueva generación de científicos, ingenieros, profesionistas, artistas e intelectuales de quienes, en última instancia, depende el futuro de nuestro país. Así como Irving Daniel tiene ahora una oferta de beca para estudiar matemáticas en el Centro de Investigación en Matemáticas (CIMAT), uno de los principales centros en nuestro país para la formación de científicos en esta área, las autoridades educativas de nuestro estado deberían de estar en una búsqueda permanente de talentos para apoyarles y fortalecer sus capacidades. Esto implica, por supuesto, extender la cobertura educativa, mejorar la formación de profesores, establecer amplios programas de becas y revisar, en general, el modelo docente.
La gran paradoja es que si bien tenemos jóvenes brillantes como Irving Daniel nuestro país ocupa un sitio poco destacado en materia de calidad educativa, con énfasis en las ciencias y la comprensión de lectura, de acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). La eficiencia terminal es también muy baja puesto que de cada 100 niños que ingresan a la primaria, 17 entran a la universidad y apenas 2 consiguen cursar un posgrado. Por ello, el caso de Irving Daniel no debe ser sólo motivo de regocijo sino también de reflexión.
¿Cuántos como Irving Daniel puede haber en ese grupo de 3 mil niños y adolescentes que anualmente, por falta de recursos, abandonan la escuela en el estado de México? ¿Cuántos de entre los 3 millones de niños en todo el país, que tienen que trabajar y no pueden estudiar, podrían desarrollar las habilidades para labrarse un futuro académico promisorio? Más aún, ¿cuánto pierde nuestro país al permitirse esta intolerable dilapidación de talento, esfuerzo y creatividad?
Artículo publicado el pasado 24 de julio en Milenio Diario, estado de México
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